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Mostrando las entradas etiquetadas como Historia

Crecepelos

(Foto de William Eggleston)  Primero fue la Historia. El auge de las novelas "históricas" produjo un boom editorial y, a su calor, miles de personas consideraron que eso que se contaba ahí era la historia de verdad. Los historiadores se replegaron y los escritores de "historia" ocuparon los púlpitos, los escaños del Congreso y las librerías. Ahora mismo la gente conoce determinados acontecimientos históricos, o cree conocerlos, a la luz de esas novelas y no de los libros de Historia, relegados al saber académico.  Después fue la Psicología. La vida moderna produce un sinfín de nuevas patologías y nada mejor que alguien que te conduzca, que te diga, sin compromiso y sin prospecto, qué has de hacer para vivir mejor, para superar un desamor, para recuperarte de un duelo, sea este el que sea. Los coach y el coaching desterraron a los psicólogos a sus consultas y ocuparon los programas de televisión y de radio además de, otra vez, las librerías. Si existen psicólogos de

"Churchill. La biografía" de Andrew Roberts

Una portada tan poco fotogénica como el personaje encierra un libro tan voluminoso que ha de leerse despacio, rodeada de notas y mapas, y, sobre todo, con el sosiego de las ideas no preconcebidas. Te reconcilia con la Historia, esa que estudiaste en la Facultad y que te convirtió en una adicta a las fuentes de la verdad. La que, por el contrario, te impide disfrutar con novelas supuestamente históricas que son cualquier cosa menos verdaderas. La Historia no necesita novelarse, piensas. En sí misma es, si se cuenta bien, una lectura espléndida.  Hay personajes muy biografiados. Ejercen una atracción especial y guardan tantas aristas que los historiadores no pueden resistirse a investigar sobre ellos y a escribir. En el caso de Churchill su vida, o al menos alguna parte de ellas, ha sido también objeto de múltiples artículos de prensa, de referencias e, incluso, de películas, las últimas muy recientes. Colateralmente aparece en diferentes formatos a la hora de recordar los episod

Los diez de Hollywood

Es muy frecuente la confusión entre la House Un-American Activities Committee (Comité de Actividades Antiamericanas) y la Subcomisión del Senado para Asuntos Internacionales o de Seguridad Nacional. Sin embargo hay diferencias sustanciales entre ambas. La primera emanaba de la Cámara de Representantes y existió desde 1934 hasta 1975. Su punto de mira estuvo tanto en los nazis, como en el Ku-Kux-Klan o el comunismo. Fue este Comité el que interrogó en 1947 a los productores, actores, guionistas y directores de Hollywood en relación con su pertenencia al Partido Comunista. El senador McCarthy estaba entonces en otra cosa, aunque muy en esa línea de buscar enemigos de América. Como presidente de la Subcomisión del Senado dio a conocer en 1950 una lista de 205 supuestos espías que estaban, nada menos, que en el Departamento de Estado. Su objetivo era, pues, demostrar que el propio Gobierno y las instituciones americanas estaban plagadas de agentes que hacían un doble juego, suminis